MOAÑA
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GUÍA TURÍSTICA
QUÉ VISITAR
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CHAN DE ARQUIÑA
Carballido, Domaio, Moaña - Pontevedra Se trata de un monumento funerario megalítico prehistórico que consta de cámara poligonal y corredor de entrada orientado al este. Tiene 11 piedras verticales en la cámara y 5 en el corredor. En él se puede observar como iba cubierto de tierra y se halla rodeado de un anillo de piedras que es el resto de la coraza que lo cubría. Durante los trabajos de excavación fue encontrado en él un ajuar funerario compuesto por útiles de piedra y fragmentos de cerámica, entre ellos uno de vaso campaniforme. También aparecieron restos de ocre, teniendo posiblemente un uso pictórico. Podría datarse sobre 3000 años a.c.
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IGLESIA DE SAN MARTIÑO
O Cruceiro, 36954 Moaña - Pontevedra La Iglesia de San Martiño de Moaña presenta planta de cruz latina, cubierta de falsa bóveda y torre lateral. Su estructura original fue modificada en el siglo XVIII. Como consecuencia de ello perdió su primitivo ábside románico, pero conserva todavía la nave románica y una interesante portada del siglo XII. Sobresale en la referida portada el tornalluvias que aparece sostenido por dos altas columnas de fuste monolítico. En el tímpano hay una curiosa representación de San Martiño, quien aparece acompañado de san Emiliano, san Bricio y otros dos santos.
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SITUACIÓN
Moaña está situada en la provincia de Pontevedra, en la costa, formando parte de la península de Morrazo, orientada de E-O a la orilla norte de la ría de Vigo. La península de Morrazo es el referente histórico y natural de Moaña. Se trata de un conjunto enmarcado por las rías de Pontevedra y Vigo, comprende cinco municipios pertencientes al partido judicial de Pontevedra (Bueu, Cangas, Marín, Moaña y Vilaboa), que se extienden sobre una superficie de 181.3 km2, de los que 31.5 corresponden a Moaña.
Moaña está situada en la provincia de Pontevedra, en la costa, formando parte de la península de Morrazo, orientada de E-O a la orilla norte de la ría de Vigo. La península de Morrazo es el referente histórico y natural de Moaña. Se trata de un conjunto enmarcado por las rías de Pontevedra y Vigo, comprende cinco municipios pertencientes al partido judicial de Pontevedra (Bueu, Cangas, Marín, Moaña y Vilaboa), que se extienden sobre una superficie de 181.3 km2, de los que 31.5 corresponden a Moaña.
CÓMO LLEGAR
Las comunicaciones con el exterior son particularmente buenas (para el caso de Galicia, cuando menos), después una carretera enlaza Moaña con Marín, y esta población se une a la capital de la provincia (Pontevedra) por autovía.
La carretera principal de la zona (la comarcal 551 que une Cangas con Moaña) tiene acceso al margen sur de la ría a través de autopista por el puente de Rande, unido con Vigo. Por otra parte, se mantiene la histórica linea de barcos de pasaje que une cada hora Moaña con Vigo. Completan la red de comunicaciónes una intensa malla de carreteras locales que penetran al interior más despoblado. |
HISTORIA
Las primeras noticias de ocupación humana de estas tierras corresponden al hacha de época achelense (75.000 a. C.) que se encontró en la parroquia de San Martiño. En las parroquias de Domaio, O Carme, Meira y Tirán también se han encontrado útiles de sílex así cómo restos de asentimientos que abarcan desde elNeolítico al Medievo. En O Regueiriño (Domaio) se halló un importante yacimiento correspondiente al Neolítico final y en A Fontenla (Domaio) se documentó por primera vez en Galicia la presencia de elementos de la Cultura del vaso campaniforme fuera de ambientes funerarios. En Meira, Domaio y Tirán hay petroglifos (grabados rupestres) relevantes (cómo los de Montealegre, a Borna, As Cidades, Pozo Garrido, A Escada, Os Remedios, etc.) y se han hallado herramientas y armas de cobre y bronce.
La cultura castreña esta ampliamente representada en el municipio. Los Castros de Montealegre en Domaio, As Cidades en Meira, O Castro en San Martiño y Os Remedios en Tirán son los más importantes. En todos ellos se aprecian fuertes indicios de romanización.
En la Edad Media Moaña estuvo bajo la jurisdicción episcopal de Iria Flavia y Santiago de Compostela. En el siglo VII los ataques Normandos provocaron una pérdida de población en todo el Morrazo, pero a partir del siglo XII, cuando el arzobispo Xelmírezestableció un buen plan de defensa de la costa se dio un nuevo resurgir de la población. De estas fechas son las iglesias de San Martiño y de San Xoán de Tirán. Familias como los Meira, los Valadares o los Soutomaior, a partir del siglo XIV controlan el municipio. Es de destacar el episodio de la destrucción de la torre de Meira dentro de segunda guerra Irmandiña (1467-69).
En el siglo XVII la introducción del maíz cambia la economía de tal forma que el 90% de la superficie cultivada es para este vegetal, lo cual hace que surjan un sinfín de molinos por todos los ríos y regatos de la comarca. En todo ese tiempo la pesca ha sido una actividad fundamental en la economía del municipio, pero en el siglo XVII la llegada de los conserveros catalanes buscando sardina genera un crecimiento demográfico y económico muy destacable. Estos invierten muchas de las ganancias en edificaciones, tanto civiles (pazos) cómo religiosas (iglesias).
En 1702 se produce la batalla de Rande y las fuerzas inglesas y holandesas toman y saquearán Domaio, Meira y Tirán. Cien años después (1809) se libran batallas en estas tierra contra el invasor francés.
Hasta el siglo XIX las parroquias de Meira, Moaña y Domaio no tenían jurisdicción propia, sino que pertenecían al Ayuntamiento de Cangas. Es a raíz de la reorganización de Galicia cuando se constituye el ayuntamiento de Meira, que integraba a cuatro parroquias: Santa Baia de Meira, San Pedro de Domaio, San Martiño de Moaña y San Xoán de Tirán. esto sucede en octubre de 1836. En 1874 se cambia el nombre del municipio por el de Moaña y se traslada la capitalidad del mismo. Posteriormente se crea la parroquia de la Virgen del Carmen en 1955.
El siglo XX entra en Moaña con la creación del puerto y la carretera comarcal, lo que abre definitivamente su economía al mar y a las actividades que a él se deben. En la primera mitad del siglo XXhay un fuerte desarrollo del asociacionismo civil, con el nacimiento de las primeras sociedades agrarias y organizaciones sindicales, como la de los canteros o la de los marineros con su Alianza Mariñeira. Ya con la II República se produce una incremento de la organización obrera, gracias a la cual se crean nuevos sindicatos de pescadores como Solidariedade Mariñeira, relacionada con la CNT. Florece en Meira la industria de hilanderas que realiza diferentes labores de cordelería que ocuparía todos los años centrales del siglo XX centrando su mayor pujanza en las décadas de los años 30 y 40 donde llegó a haber más de 700 trabajadores, haciendo crisis en los años 60 con la entrada de los productos sintéticos. Esta industria, que ocupaba mucha mano de obra femenina, dio lugar a un movimiento sindical que tenía a la asociación Sociedad de Hiladoras y Oficios Varios, La Defensora como máxima expresión. Tras varias movilizaciones, que acabaron con una huelga, consiguieron la jornada de ocho horas. Sus líderes, Enedina Esperón González y Juan Eugenio Gallo San José que fueron representados después de la Guerra Civil.
En la segunda mitad del siglo XX se produce un desarrollo de la economía con un crecimiento de la actividad pesquera, la construcción naval y la industria de transformación de productos del mar, a la vez que se comienza el cultivo del mejillón y del berberecho. Aprovechando el tirón turístico de Cangas, Moaña empieza a explotar sus recursos en este campo, creando complejos turísticos como el da A Fraga o el campo de golf de Domaio a la vez que logra acondicionar playas con bandera azul.
El siglo XXI trae a Moaña una mejora sustancial de las comunicaciones, tan importante como lo fue la autopista y el puente del Rande en los años 70 del siglo XX (libre de peaje para los tráficos Moaña-Vigo desde el 1 de junio de 2006), con la vía rápida del Morrazo y el desarrollo de puertos deportivos, en Domaio y Moaña centro que potencian el turismo.
La cultura castreña esta ampliamente representada en el municipio. Los Castros de Montealegre en Domaio, As Cidades en Meira, O Castro en San Martiño y Os Remedios en Tirán son los más importantes. En todos ellos se aprecian fuertes indicios de romanización.
En la Edad Media Moaña estuvo bajo la jurisdicción episcopal de Iria Flavia y Santiago de Compostela. En el siglo VII los ataques Normandos provocaron una pérdida de población en todo el Morrazo, pero a partir del siglo XII, cuando el arzobispo Xelmírezestableció un buen plan de defensa de la costa se dio un nuevo resurgir de la población. De estas fechas son las iglesias de San Martiño y de San Xoán de Tirán. Familias como los Meira, los Valadares o los Soutomaior, a partir del siglo XIV controlan el municipio. Es de destacar el episodio de la destrucción de la torre de Meira dentro de segunda guerra Irmandiña (1467-69).
En el siglo XVII la introducción del maíz cambia la economía de tal forma que el 90% de la superficie cultivada es para este vegetal, lo cual hace que surjan un sinfín de molinos por todos los ríos y regatos de la comarca. En todo ese tiempo la pesca ha sido una actividad fundamental en la economía del municipio, pero en el siglo XVII la llegada de los conserveros catalanes buscando sardina genera un crecimiento demográfico y económico muy destacable. Estos invierten muchas de las ganancias en edificaciones, tanto civiles (pazos) cómo religiosas (iglesias).
En 1702 se produce la batalla de Rande y las fuerzas inglesas y holandesas toman y saquearán Domaio, Meira y Tirán. Cien años después (1809) se libran batallas en estas tierra contra el invasor francés.
Hasta el siglo XIX las parroquias de Meira, Moaña y Domaio no tenían jurisdicción propia, sino que pertenecían al Ayuntamiento de Cangas. Es a raíz de la reorganización de Galicia cuando se constituye el ayuntamiento de Meira, que integraba a cuatro parroquias: Santa Baia de Meira, San Pedro de Domaio, San Martiño de Moaña y San Xoán de Tirán. esto sucede en octubre de 1836. En 1874 se cambia el nombre del municipio por el de Moaña y se traslada la capitalidad del mismo. Posteriormente se crea la parroquia de la Virgen del Carmen en 1955.
El siglo XX entra en Moaña con la creación del puerto y la carretera comarcal, lo que abre definitivamente su economía al mar y a las actividades que a él se deben. En la primera mitad del siglo XXhay un fuerte desarrollo del asociacionismo civil, con el nacimiento de las primeras sociedades agrarias y organizaciones sindicales, como la de los canteros o la de los marineros con su Alianza Mariñeira. Ya con la II República se produce una incremento de la organización obrera, gracias a la cual se crean nuevos sindicatos de pescadores como Solidariedade Mariñeira, relacionada con la CNT. Florece en Meira la industria de hilanderas que realiza diferentes labores de cordelería que ocuparía todos los años centrales del siglo XX centrando su mayor pujanza en las décadas de los años 30 y 40 donde llegó a haber más de 700 trabajadores, haciendo crisis en los años 60 con la entrada de los productos sintéticos. Esta industria, que ocupaba mucha mano de obra femenina, dio lugar a un movimiento sindical que tenía a la asociación Sociedad de Hiladoras y Oficios Varios, La Defensora como máxima expresión. Tras varias movilizaciones, que acabaron con una huelga, consiguieron la jornada de ocho horas. Sus líderes, Enedina Esperón González y Juan Eugenio Gallo San José que fueron representados después de la Guerra Civil.
En la segunda mitad del siglo XX se produce un desarrollo de la economía con un crecimiento de la actividad pesquera, la construcción naval y la industria de transformación de productos del mar, a la vez que se comienza el cultivo del mejillón y del berberecho. Aprovechando el tirón turístico de Cangas, Moaña empieza a explotar sus recursos en este campo, creando complejos turísticos como el da A Fraga o el campo de golf de Domaio a la vez que logra acondicionar playas con bandera azul.
El siglo XXI trae a Moaña una mejora sustancial de las comunicaciones, tan importante como lo fue la autopista y el puente del Rande en los años 70 del siglo XX (libre de peaje para los tráficos Moaña-Vigo desde el 1 de junio de 2006), con la vía rápida del Morrazo y el desarrollo de puertos deportivos, en Domaio y Moaña centro que potencian el turismo.